Regreso al presente

Estos días están siendo muy convulsos en el Estado Español. A la eterna crisis que no termina, con su millón largo de parados en Andalucía, con su deuda, con sus rescates a los bancos, con sus desahucios, con una derecha pepera recortando aquí y allá y amenazando con quitarnos las migajas autonómicas y con una derecha sociata haciendo ejercicios de hipocresía a diario criticando lo que ellos hacían hace 5 meses, se suman dos sucesos que entre sí no tienen otra pinta que la de contradicción mortal.

Por una parte, tenemos la muerte de Iñigo Cabacas a manos de la policía española (Si, la ertzaintza es española y más si es manejada por un ser maquiavélico como es Rodolfo Ares, un personaje que como cualquier dirigente sociata afincado en Euskadi (O no) tiene ese tufillo a galoso que no se quita con nada y que antes o después va saliendo al aire) provocada por un pelotazo de goma que le golpeó en la cabeza.  No es una noticia que esté teniendo la suficiente repercusión en los medios de información oficiales, que prefieren hablar para no variar de ETA o de los malvados sirios cuyas fuerzas de seguridad matan presuntamente a sus ciudadanos… Curioso cuanto menos. ¿Para qué hablar de los asesinatos de las fuerzas de seguridad españolas cuando podemos hablar de las de un país que está a miles de kilómetros de distancia…? Aunque tranquilos, que para el 1 de enero de 2013 el Gobierno Vasco eliminará el uso de balas de goma [1], tampoco vayamos a darnos mucha prisa, que todavía podemos saltar un ojo a algún manifestante [2] más antes de Nochevieja, aunque es verdad que esa es una práctica más habitual en los Països Catalans (Los dos últimos en las manifestaciones del 29-M en Barcelona).

Y por otra parte, tenemos la madre de todas las reformas legales antisociales hasta ahora promulgadas por el Gobierno Español del Partido Popular. Hasta la resistencia pasiva o el convocar movilizaciones a través de internet y redes sociales podrá ser considerado “delito de terrorismo” [3], dando una vuelta de tuerca más al estado pre-fascista en el que nos encontramos. La gracia y la contradicción es que lo digan justo después de que la Ertzaintza asesinara a Iñigo Cabacas. Resulta que a los que son asesinados hay que recortarles libertades para protegernos de ellos. Es aquí donde me gustaría detenerme medio segundo para reflexionar sobre algunos comentarios de personas que indignadas, claman contra esta medida.

“Pero con esta ley… ¡Se van a llenar las cárceles españolas de presos políticos!” Leía por ahí esta mañana sin salir de mi asombro. ¿Cómo que se van a llenar? Como si no hubiera presos políticos en el Estado Español. Sólo en el Estado Español hay 496 presos políticos vascos [4], mientras que en el Estado Francés hay otros 138 más [4]. Esto es solamente hablando de los presos políticos vascos, porque a estos se unen las decenas de presos antifascistas del PCE (r) (Entre ellos su Secretario General, Manuel Pérez Martínez “Arenas”)[5], y las decenas de presos políticos anarquistas e independentistas gallegos, asturianos o catalanes, sin hablar ya de las numerosas peticiones de multas económicas y de cárcel que planean sobre varios sindicalistas del Sindicato Andaluz de Trabajadores [6]. La lista sigue y seguirá con la reforma legal o sin ella.

Es una buena noticia el que los trabajadores vayan despertando poco a poco y que vayan comprobando la represión que existe y que irá en aumento, aunque me da un poco de pena que haya tenido que ser a costa de los ojos de unos cuantos manifestantes, de la vida de otro, y de la promulgación de una ley que nos lleva como en una máquina del tiempo a… a donde estábamos ahora, porque aquí muy poca cosa ha cambiado. La capa de barniz que pudieron dar al Estado franquista heredado por Juan Carlos I, posibilitada por una coyuntura económica favorable que permitió la construcción del llamado Estado del bienestar que tanto adormeció a la gente, se está diluyendo poco a poco con la crisis, y es en este momento cuando el monstruo del fascismo asoma su cabeza. Pero no caigamos en el error de querer volver a lo anterior, porque en lo anterior, había presos políticos, había balazos de goma, y había represión en general. Lo que venga tiene que ser mucho mejor. Es una empresa muy difícil, pero necesaria.

Espero que las campañas para evitar que la policía utilice balas de goma no caigan en saco roto, y que sirva no sólo para eso, sino también para elevar la conciencia de los trabajadores y que cada vez más gente se dé cuenta de lo que pasa en el Estado Español y de lo que lleva pasando en él desde la muerte del Caudillo, una muerte que fue física, pero no completa como hemos podido comprobar.

Y como no podría ser de otra manera, y reconociendo el gran ejemplo que dan los que hoy andan olvidados entre las rejas de las celdas españolas, tengo que reivindicar más fuerte que nunca la libertad de todos los presos políticos antifascistas.

[1] http://www.kaosenlared.net/component/k2/item/14611-el-gobierno-vasco-dice-ahora-que-prohibir%C3%A1-usar-a-partir-de-2013-escopetas-de-pelotas.html

[2] http://canarias-semanal.com/not/1917/los_tuertos_de_artur_mas/

[3] http://www.kaosenlared.net/component/k2/item/14593-fascismo-institucionalizado-el-ministro-del-interior-anuncia-medidas-de-criminalizaci%C3%B3n-de-cualquier-protesta.html

[4] http://www.etxerat.info/orokor.php?id_saila=10&id_edukia=31&lang=es

[5] http://www.presos.org.es/index.php?m=1&d=d1

[6] http://stoplarepresion.wordpress.com/represion-contra-el-soc-sat/